Vacaciones de resorte

Pues asé tal y como se ve a Super Ratón en la caja, saltando al vacío lleno de excitación, así estamos Vinh y yo, y todos los que esperamos el fin de curso como agua de mayo. El día 22 sera el resorte que haga saltar nuestra tapa. Y saltaremos el país primero, el Atlántico después, y todo nos hará aterrizar en Madrid, como si el tiempo queha pasado desde Navidades y la distancia nunca hubieran estado allí.

Matando el tiempo

¿Cómo matamos el tiempo en América? Pues últimamente, yendo de conciertos. El último fue el sábado pasado en el Shoreline. Fuimos a ver a Bjork, y bueno, ella, como siempre en su línea.

El miércoles que viene, iremos a ver a Manu Chao. En enero, tocó Paco de Lucía. Y un mes más tarde, vimos a Sara Baras bailando. Pero de todos los espectáculos y conciertos, con el que me quedo, y creo que lo haré por mucho tiempo, es con el de Jorge Drexler (aquí os pongo un vídeo del concierto con "todo se transforma"). En plan "groupi" que te pasas, incluso me quedé acechando después de que hubiera acabado el concierto y me hice una foto con él. Tenía que inmortalizar aquella noche en la que. en medio de una audiencia de lo más diversa en San Francisco, el señor Drexler acabó hablando de un pueblo de la sierra madrileña, de Villalba (para dar más señas) en el que se fue la luz en plena actuación, y tuvo que cantar a capella, aquello de... "clavo mi remo en el agua... creo que he visto una luz al otro lado del río". Qué gran tipo, este Jorge.

La rect final

La recta final se aproxima... no nos queda nada de curso, y parece que ha pasado lento a la par que raudo. Por una parte, como siempre y para no variar, me dan pena algunas de las cosas que se acaban. Probablemente lo que más pena me da sea el decir adios a la gente que se vuelve. Quizá lo divertido que ha sido tener a niños afroamericanos a mi alrededor y haber conocido a algunos compañeros o amigos que tanto inglés (de ese que no está en los libros) me han enseñado. Mi equipo de tercero, con los que tanto he trabajado, con los que tantas diferencias he tenido.

Pero en general, creo que este final de curso está más lleno de satisfacciones que otra cosa. Por un lado ya tengo trabajo en Franklin McKinley. Me ha vuelto a tocar dar clase a niños de segundo en Meadows, y la verdad que tiene buena pinta. Es cierto que se están embarcando en proyectos bastante ambiciosos, pero con todo lo que me han hecho currar este año, eso no me intimida demasidado, la verdad. Además este próximo curso trabajare con Johnny. Quién me lo iba a decir.

Vinh aun esta a la espera de saber qué curso y a qué cole le mandan. La verdad es que nos habría encantado volver a trabajar juntos, a pesar de la cara de asombro e incredulidad de aquellos a quienes se lo decimos. Qué le vamos a hacer, somos así de emapalagosos.

De momento el pobre no se aburre, no. Está haciendo deberes como loco para acabar su masters, lo que pasa es que por mucha prisa que se de, le queda un buen año y medio. Yo me siento culpable por no poder ayudarle. Lo está haciendo para tener mejores posibilidades de entrar en el American School Of Madrid, y sé que la "culpable" de eso soy yo. Pero bueno, también tiene razón cuando me dice que a mí ya me tocó en su día dar la chapa cuando me preparé las opos. Así que cuando no vegeto en el sofá, me dedico a leer. Este año me estoy poniendo al día y recuperando el tiempo perdido por todo lo que no leí los dos últimos.

Bueno, pues a dar el último empujón y esto ya está hecho! Ánimo a todos los que están como nosotros.